En la foto aparecen nueve personas y sobre la cabeza de uno de ellos aparece el que se supone es el fantasma.
Se trata de un joven moreno, camisa blanca, pero que su torso va degradando y perdiendo entre los arboles de la parte posterior y no se le ve el resto del cuerpo.
Cesar Martínez es un docente que tomó la fotografía con su celular y asegura que nadie estaba detrás de las personas cuando tomo la foto.
Vecinos del sector le contaron después que se trataría de un joven al que apodaban ‘el rula’ y que jugaba en esa misma cancha. Al joven lo asesinaron en una fiesta de pick up.
La fotografía fue analizada por varios sacerdotes quienes no confirman ni descartan que la aparición sea cierta, lo que sí coinciden es que a través de una liturgia se pretende buscarle el descanso eterno a esta supuesta alma en pena.
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